Tras las declaraciones de todos los implicados en el asunto, se podrán practicar otras pruebas que el Juzgado considere oportunas y necesarias para esclarecer los hechos y concluir la fase de investigación o instrucción.
A modo de ejemplo, se podrán oír a los testigos que puedan aportar claridad al asunto, solicitar informes médicos para valorar lesiones o informes de peritos para valorar daños, etc.
Una vez finalizada la investigación, si el Juez considera que existen indicios de haberse cometido algún delito por parte de personas concretas e identificadas, pedirá al Fiscal y a los Abogados de la acusación, que presenten un escrito acusando a los investigados y solicitando que se les condene a determinadas penas, o bien presenten un escrito solicitando que no se les acuse ni se les imponga pena alguna.
Si el Fiscal o alguno de los Abogados presentan acusación, y solicitan penas para los investigados, el asunto acabará en un Juicio. Si por el contrario ninguno de ellos acusa, el asunto acabará sin juicio y sin pena.
En el supuesto de que se haya producido acusación contra alguna persona, el Juzgado la citará para informarle de las penas que le piden, y una vez informada se pasarán los escritos de acusación al abogado defensor para que pueda presentar el escrito de defensa, que rebatirá lo manifestado por las acusaciones y solicitará la libre absolución del acusado.
El Juzgado que ha realizado la investigación, tras recibir los escritos de acusación y defensa, trasladará todo el expediente al Juzgado o Tribunal que se encargará del juicio, para que fije el día y la hora de la celebración del juicio, y disponga lo necesario para poder practicar las pruebas fijadas para dicho juicio.